Voy buscando en la espesa jungla
una bella joya que perdí
la virginidad de mi selva
que unos intrusos mancillaron
por caucho, oro y petróleo
por una ambición desmedida.
Sus grandes ríos me recuerdan
a la yacumama al serpentear
y los frondosos aguajes
las cabellos de la mujer nativa,
y los pequeños bombonajes
los adornos del jefe nativo.
Tenía mucha vida en sus bosques
como imaginar que lo acabarían
inaceptable profanación
bastaba pensar al futuro
para no destruirla toda
bastaba pensar en el hombre,
para preservarla incólume.
me gusta pues me encanta la naturaleza en si es pureza
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